Los cuidados dentales a temprana edad son indispensables para que a futuro, el pequeño no padezca de enfermedades bucales graves. Descubre cómo hacerlo

Los bebés nacen con una serie completa de 20 dientes de leche escondidos en las encías: 10 arriba y 10 abajo. A medida que cada uno llega a la superficie, ésta se abre para mostrar las piezas.

La mayoría de los primeros dientes aparecen entre los 6 y los 10 meses, pero a los niños les brotan en distintos momentos. Incluso, hay a quienes les aparecen ya a los tres meses. En otros, no llegan, sino hasta alrededor de los 12 meses.

Cuidados dentales | ¿Cómo limpiar la boca de tu hijo?

Antes y después de la salida de los dientes, debes limpiar la boca de tu hijo después de cada toma o al menos dos veces al día. Usa una gasa limpia o un paño suave sobre tu dedo. Sumerge la gasa en agua para que esté húmeda, pero no empapada. Frota el área de las encías de tu hijo con suavidad.

A partir de los 3 años o cuando te percates del primer diente es el momento preciso de introducir una pasta de dientes con flúor. Utiliza la cantidad de pasta similar al tamaño de un grano de arroz.

Para los niños de 3 años en adelante, la cantidad es mayor, como el tamaño de un guisante. Tu hijo debe intentar escupir la pasta de dientes, aunque es seguro tragar estas pequeñas cantidades si tu pequeño aún no escupe. Del mismo modo, debes poder ver fácilmente el interior de su boca.

Al salir los dientes, debes utilizar un cepillo de dientes pequeño y suave. Coloca el cabezal (las cerdas) del cepillo en ángulo a lo largo de una fila de dientes y contra la línea de las encías. Recuerda hacerlo suavemente con movimientos circulares y termina pasando las cerdas por la lengua.

Tu pequeño ya debe empezar a aprender a cepillarse a partir de los 2 años. A los 10, debería ser capaz de hacerlo solo. Puedes empezar a enseñarle haciendo que te vea cepillar los dientes primero.

¿Qué hacer para prevenir las caries?

Para lograr una buena salud dental desde edad temprana es indispensable que tu pequeño siga un ritmo alimenticio sano. Procura que no coma o beba con mucha frecuencia a lo largo del día. Cada vez que bebe o come algo, en 20 minutos el azúcar que contienen los alimentos y se quedan entre las encías y dientes, se convierte en un ácido que los corroe. Para que sepas qué hacer, te dejamos esta pequeña guía a continuación.

• • • Utiliza el biberón sólo a la hora de comer. No lo uses como chupete.
    • No acuestes a tu bebé con un biberón de fórmula o de leche materna.
    • Si tu bebé se duerme mientras le das el pecho, quítaselo de la boca.
    • Una vez que aparezca el primer diente, evita la toma nocturna y las tomas frecuentes a demanda.
    • Destete al bebé del biberón al vaso antes de los 12 meses de edad.
    • Después de que tu hijo cumpla un año, si tiene sed, puede beber un sorbo de agua en cualquier momento del día. No le des otras cosas para beber, excepto en las comidas.

Otras recomendaciones con las que debes relacionarte para los cuidados dentales

Usa flúor

El flúor fortalece y es una sustancia especial que ayuda a proteger los dientes de las caries. Después de que aparezca el primer diente de tu hijo, el dentista o el higienista dental puede poner una capa de flúor en sus dientes. El odontólogo especializado debe verificar periódicamente el estado de la dentición de tu pequeño.

Regula la dieta

No le des a un niño menor de un año bebidas azucaradas, zumos o agua. Dale, únicamente, leche materna o de fórmula. No añadas azúcares, como la miel, a las bebidas. A partir de los 12 meses, ofrécele agua entre las comidas.

No le des otras cosas para beber excepto en las comidas. Enjuágale la boca con agua después de comer cualquier cosa azucarada. Los niños pueden tomar ocasionalmente 4 onzas de zumo 100% en una comida.

Evita darle bocadillos de gominola y alimentos que puedan pegarse y permanecer en los dientes durante mucho tiempo. Además, a medida que su hijo crezca, ofrécele más frutas y verduras crudas y crujientes, queso y yogur como tentempiés.

En la dentición

Para que tu hijo se sienta mejor, a veces ayuda a frotar suavemente las encías con el dedo limpio o darle un objeto limpio y frío para que lo mastique, como un anillo de dentición. En esta etapa tu pequeño puede babear más, estar inquieto y tener poca fiebre durante uno o dos días. ¡No te preocupes! Es totalmente normal.

Llévalo al odontólogo

Planifica una visita regular con el especialista para que este se vaya relacionando con esto y puedas hacerle un hábito bucal saludable. Lo mejor es hacerlo cuando el niño ya presente su primer diente. Recuerda que es tan importante como llevarlo al pediatra.

Es necesario la visita al odontólogo periódicamente para que efectúe una evaluación exhaustiva y determine si los cuidados dentales se están realizando de manera adecuada. La prevención y el diagnóstico detectado a tiempo evitará afecciones posteriores, además de aplicar el tratamiento correctivo.

Para una evaluación odontológica y la aplicación de cualquier otro procedimiento como tratamientos estéticos o funcionales, solicita tu cita a través los siguientes números telefónicos: +58 (212) 280.08.93 / 95 o agenda una consulta con  por WhatsApp citas: +58 (0424) 251.1400.