Un descubrimiento dental innovador mundialmente, fue realizado por científicos venezolanos. Veamos de qué se trata.

En el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) se ha llevado a cabo y puesto en práctica un descubrimiento dental inédito en la Unidad de Terapia Celular. A un diente (sin sensibilidad) por primera vez se le implantaron células madres, y gracias al procedimiento fue recuperado.

Descubrimiento dental | Detalles del procedimiento

El Dr. José Cardier (jefe de la Unidad y única de su tipo en América Latina) indico cómo un diente (con tratamiento de conducto) le fue restaurada su sensibilidad. Dando a conocer que:

“La regeneración celular pasa por un período experimental. Es gratuito y se aplica en Venezuela”. “La idea es que más personas formen parte del procedimiento en los distintos centros odontológicos y hospitalarios”.

Es el primer caso de regeneración de pulpa dental reportado en el mundo. “A un diente que se le había aplicado tratamiento de conducto, se le implantó células estromales mesenquimales ”.

Detalló que las células que se implantan son del área de médula ósea pero no del mismo paciente. Estas son extraídas de individuos sanos y un punto a destacar es que “esos donantes no están relacionados al paciente”. Otro aspecto que expresó fue que:

“Las células estromales mesenquimales no presentan rechazo por parte de los pacientes, por lo que pueden ser usadas en otras personas” – Dr. Cardier.

Células madres aplicadas en diferentes tratamientos

Lo importante de este descubrimiento dental es que no solo se utilizan las células madres en el área de endodoncia. Sino que están siendo aplicadas en otros casos como la enfermedad periodontal y, para la regeneración de la piel de personas quemadas.

El Dr. Cardier señalo en cuanto a este descubrimiento dental y otros tratamientos, que han creado especie de un banco celular: “Se hacen cultivos celulares. Las células estromales mesenquimales se multiplican por millonadas”.

Señalando que “las van guardando en tubitos, congeladas en nitrógeno líquido, y cada vez que se necesitan se descongelan para efectuar los implantes en los pacientes”. Por lo que se refiere a la fuente de donde se extraen las células, destacó que “es la médula ósea aunque también pueden extraerse de otros órganos, entre ellos tejido grasoso o la piel”.

Específicamente describe el proceso para obtener las células; se introduce una aguja en la parte superior del hueso de la cadera, que se le denomina “cresta ilíaca”. A continuación, se succiona la médula ósea (que es como sangre) y en la unidad de terapia celular del IVIC se sigue el proceso de cultivo ya indicado anteriormente.

El procedimiento endodóntico

El Dr. Cardier explica que el servicio odontológico del IVIC cuenta con microscopios adaptados para la especialidad de endodoncia. Por lo que, se planifica la atención de pacientes que se han hecho tratamientos de conductos y que luego serán evaluados. Todo esto bajo la coordinación de un experto de endodoncia y otros especialistas, se procede a:

• • Abrir el diente nuevamente
  • Limpiar, desinfectar y colocar las células
  • Cerrar el conducto

Luego se deja que comience un periodo de evolución. Durante este tiempo se inicia una revisión endodóntica haciendo exámenes de tolerancia al frío y calor, radiografías, pequeños golpecitos en el diente y colocando puntos de electricidad.

Gracias a la labor de un equipo multidisciplinar este tipo de descubrimiento dental involucró a endodoncistas y periodoncistas, entre otras áreas. “Es una labor de quienes han efectuado la investigación principal y los avances del estudio para ser aplicados al paciente”.

Determino que para efectuar estos procedimientos se requiere de contar con todos los recursos necesarios como reactivos, materiales y equipos. De la misma manera señaló que: “Un tratamiento de conducto es una intervención de extracción pulpar. Ahí se encuentran nervios, nutrición celular, vasos sanguíneos, etc. La pulpa se forma en el embrión y cuando es retirada ya no existe la posibilidad de que se regenere, por eso se pierde la sensibilidad”.

La idea del procedimiento es que al realizar un tratamiento de conducto, popularmente conocido como “le sacaron el nervio”. El diente queda vacío (como especie de un panal de abeja) y aunque sirva de soporte, se encuentra muerto. El objetivo es que el diente recupere su sensibilidad para que “este vivo” y así se le implante una corona para que no tenga que estar sobre un “diente muerto”.

Llegar a la cantidad de pacientes que lo necesiten

Ante todo lo señalado, el galeno resaltó que estos procedimientos al ser experimentales, los pacientes no pagan nada en absoluto. Otro punto que destaco es que ya alcanzada la cantidad completa de casos, se procederá a solicitar las respectivas autorizaciones para que estas células que funcionan “como especie de tratamiento” obtengan el registro sanitario correspondiente.

Según el Dr. Cardier el servicio odontológico del IVIC recibe de 10 a 12 pacientes en una mañana. Aunque señaló que “han logrado ver en una sola tarde sobre 20 casos referente a la parte periodontal y de regeneración pulpar”.

Esto nos indica que puede generalizarse el tratamiento. Al efectuar los permisos sanitarios, el siguiente paso es enviar las células a los centros hospitalarios y odontológicos; privados o públicos.

Descubrimiento dental de alto impacto

Este descubrimiento dental ha causado revuelo. La revista Journal of Endodontic (una de las más prestigiosas en el área de odontología y endodoncia) lo publicó como caso único. Identificándolo como un “case report” (reporte de un caso), denominado así en revistas internacionales por el impactó suscitado. Esto motiva finalmente a señalar que:

“Venezuela en relación a la regeneración de tejidos y órganos, está a la vanguardia en Latinoamérica y el mundo”.

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